La tecnología es el motor consecuente que permite mejores procesos. Este facilitador o asistente (independientemente de su campo profesional) tiene arraigo y es potenciador de mejores procesos y por ende mejores resultados.
En el sector del AECO (Arquitectura, Ingeniería y Construcción), este arraigo tiene sus inicios que van de procesos calculistas con exhaustivas fórmulas y dibujos a mano, al uso de la computadora asistida. Es en este punto donde cambia el esquema laboral desde todo el punto de vista.
Grandes mesas, grandes bitácoras con memorias de cálculo, se empiezan a simplificar por programas que trabajan con vectores y desarrollo de cálculos. Sin duda alguna, un avance. Fue el primer paso que simplificó muchos procesos.
La construcción mejoraba con procesos y creación de materiales según la demanda de los diferentes entornos y necesidades gracias al CAD y al CAM. Sin embargo, la coordinación seguía siendo un proceso muy complejo que carecía de una relación directa y asistida. Procedimientos de planificación, coordinación, predicción y de programación entorpecían el flujo, posiblemente generando retrasos, pérdidas y reprocesos. Justamente con estos procesos exhaustivos y poco colaborativos, es donde la Metodología BIM empieza a dar sus primeros pasos al punto de lograr que organizaciones, constructoras, estudios de diseño y recientemente países generen estándares y protocolos que facilitan la construcción en la actualidad.
Cómo puede ayudar BIM a la toma de decisiones
BIM es una metodología que cada vez tiene más fuerza y se espera que en la próxima década sea la metodología común en los proyectos inmobiliarios. Sus herramientas son de gran variedad y dependiendo de la especialidad pueden variar.
Su esquema se basa en la simulación, e involucra cada una de las diferentes etapas de diseño, construcción y management que se manejan hoy día. Lo más determinante: integral y multidisciplinario, pudiendo involucrar a los diseñadores, contratistas, constructores y el cliente. Se enumeran resumidamente algunas de las ventajas y cómo pueden influenciar en la toma de decisiones:
VISUALIZACIÓN: Los modelos 3D son muy prácticos y ágiles para demostrar cómo se tiene que construir o realizar una estructura. Se toman decisiones oportunas y acertadas, dejando de lado las malas interpretaciones que se pueden dar en planos 2D. Permite que el cliente entienda su proyecto.
CUANTIFICACIÓN: Siendo parte de un entregable, se puede utilizar para sacar BoQ’s (Bill of Quantities o Tabla de Cantidades), que puede generar hasta un 60% de ahorro en tiempo a la hora de realizar presupuestos.
DETECCIÓN DE CONFLICTOS: Trabajar en un modelo 3D unificado multidisciplinario (Arquitectónica, Estructural, Eléctrica, Mecánica e Infraestructura) posibilita detectar conflictos y hacer los cambios necesarios para solventar el problema; (cuando se está en la etapa de diseño) o realizar los cambios en tiempo real cuando hay alguna modificación en el momento de la construcción.
ESCENARIOS: El factor tiempo y planificación del proyecto son determinantes. Con modelos 4D se pueden plantear diferentes escenarios con el fin de valorar qué es lo más adecuado para la ejecución del proyecto. Estas decisiones pueden evitar atrasos significativos en obra.
INFORMACIÓN: Con la presentación de modelos 4D antes de la construcción real, las personas que no son ingenieras o arquitectas saben cómo se va a ir realizando la obra y con esto poder consultar por qué no se ha avanzado como se ve en la simulación o determinar un atraso chequeando con el cronograma. Esto es a lo que refuerza la transparencia entre las partes. El BIM no es solamente un modelo 3D. Sus vectores y volúmenes contienen información manipulable, trazable y cuantificable. Los diferentes softwares asisten para la toma de decisiones del profesional y permiten durante el diseño ajustarse a la necesidad del cliente.
PROYECCIONES: Con modelos 5D el constructor previene las necesidades en cuanto a recursos (materiales, mano de obra, bodegaje, accesos al proyecto, maquinaria, etc.) con semanas de antelación. Con esto no incide en gastos innecesarios que suceden todo el tiempo en el sistema convencional.
MANTENIMIENTO: La fase de mantenimiento es vital para una vida útil y eficiente de los edificios. El seguimiento equivocado del mantenimiento puede elevar el costo del edificio con el paso de los años. Con modelos 7D se lleva este control predictivo, logrando el correcto de mantenimiento de todos los equipamientos eléctricos y mecánicos. Este esquema obliga a los fabricantes de todos estos sistemas a crear todos los insumos BIM que el mercado local demanda, logrando una mayor precisión en cuanto dimensiones de equipo o disposiciones físicas para mantenimiento.
TRANSPARENCIA: Lograr que todas las partes involucradas, aunque no sean expertos en la materia, entiendan y sepan la ruta que se está tomando para llegar al norte común, es de gran ayuda cuando se ejecuta el proyecto. Muchas veces los conflictos en los proyectos se dan por falta de comunicación o porque se tomó una decisión con el conocimiento parcial del problema real. BIM es de gran ayuda para evitar estas situaciones ya que toda la información está compartida en lugar común y accesible para los involucrados.
SOSTENIBILIDAD: Las condiciones del mundo actual demandan el aprovechamiento del recurso. No solo en cuando el uso material, si no en implementación de un diseño. BIM permite georeferenciar un proyecto y medir según los escenarios estadísticos de la zona el mejor emplazamiento en cuanto a las condiciones climáticas, uso de la edificación vs confort de clima y comportamiento de los materiales.
Rol del Gremio, asistencia para toma de decisiones del sector profesional
Dentro de las primeras cosas que debemos hacer como gremio es aceptar que nos estamos quedando atrás en el tema de BIM, no solo con respecto a países desarrollados sino también a hermanos países latinoamericanos.
Después de aceptar nuestra realidad, tenemos que empezar a capacitarnos e investigar como las herramientas BIM han ido cambiando el paradigma mundial en el sector de la construcción en todas las etapas del ciclo de los proyectos.
Tenemos que entender que esta apertura tiene que ser tanto del sector privado como del público, ya que en este último es donde se licitan las obras grandes; y el sector privado el que las ejecuta.
Si el sector público adopta las herramientas BIM desde los inicios de los proyectos y queda bien estipulado cómo se va a generar la información en los BEP (Plan de Ejecución BIM), se podría aprovechar mejor la información. Por ejemplo, (y como se comentó anteriormente en las ventajas del BIM), se podrían usar los modelos para cuantificar materiales, hacer propuestas constructivas y ver diferentes escenarios antes de poner la primera piedra en sitio.
A nivel personal consideramos que uno de los retos más difíciles que tenemos que enfrentar es contar con la información disponible para todos los actores. El gremio debe fomentar y compartir el conocimiento, los valores del BIM buscan un ambiente de transparencia y colaboración, donde todas las personas tengan acceso a la información y así lograr flujos de trabajos más sanos y estables. En nuestra experiencia, a la gente que no ha trabajado con esta metodología le cuesta poner su información disponible para el resto del equipo. A veces hay que solicitarla más de una vez. Este tema, tiene que verse como un desarrollo del proyecto para el cliente, y no como el desarrollo de la propiedad intelectual.
También, tenemos que decir, que una vez que se empieza con esta cultura o esquema, los involucrados se dan cuenta de que trabajar así es mucho más productivo y útil, tanto en el ámbito individual como el colectivo, logrando un desarrollo pleno y exitoso del proyecto.
La metodología BIM está cambiando el paradigma de cómo se ha realizado la construcción hasta el día de hoy. Es importante conocer su historia, sus herramientas y sus alcances para poder tomar decisiones como gremio y definir nuestra ruta para su implementación.